Aproximadamente 200 ejidatarios, pequeños propietarios, delegados y encargados de los Módulos 2,3 y 4, del Distrito de Riego 020, acudieron a la presentación del proyecto para entubar el agua de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR) de Atapaneo, y conducirla 17 kilómetros para reusarla en parcelas de cultivos.
El proyecto dispone de un presupuesto de 170 millones, que serán aportados por el Gobierno del Estado y la Comisión Nacional del Agua, en partes iguales. Y forman parte de las obras multianuales anunciadas por el Gobernador, Alfredo Ramírez Bedolla. (Consulta AQUÍ LA NOTA)
La reunión tuvo lugar en el municipio de Álvaro Obregón, donde el alcalde anfitrión, Fernando Sánchez Juárez expresó su apoyo al proyecto y sugirió “darle con todo”, ya que lo ha tenido en mente desde hace muchos años, “por mi parte cuenten conmigo compañeros del módulo de riego”.
Al exponer el plan, el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural en Michoacán (Sader), Cuauhtémoc Ramírez Romero y el director local de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Jesús Camacho Pérez, propuso a los encargados de módulos optimizar los recursos del proyecto para, con maquinaria de los 3 módulos, instalar la tubería y abatir costos.
Como ya se ha informado, la línea de conducción hidroagrícola beneficiaría a 13,599 hectáreas de riego correspondientes a los módulos del Valle Álvaro Obregón-Tarímbaro, Zacapendo-Indaparapeo y Charo, lo que permitirá el aprovechamiento del agua tratada en los cultivos de la región, que hoy son regadas con las aguas negras que llega del río grande de Morelia.
Entre la suspicacia y el optimismo los labriegos pidieron a los funcionarios hablar de frente y sin mentiras, “derecha la flecha”, pues había el rumor de que se estaba condicionando la obra a cambio de que los Módulos de Riego cedieran volumen de agua de la presa de Cointzio al Ooapas de Morelia.
Pero el propio secretario de Agricultura, Cuauhtémoc Ramírez, terminó con la especulación, “los 70 millones de metros cúbicos de agua, concesionados a los módulos 2,3 y 4 no se tocan”, sentenció, lo que dio tranquilidad y certeza a los productores.
Sin embargo, el propio funcionario les hizo notar que actualmente se pierde mucha de esa agua que llega rodada por canales de tierra, por lo que se pierde aproximadamente la mitad del volumen inicial, así, llega menos agua concesionada.
En ese sentido el director local de la Conagua pidió a los productores considerar la “propuesta” para ceder volumen de agua si hay disponibilidad e insistió en que esta es apenas una primera etapa para lograr un mayor aprovechamiento del agua y se seguirá avanzando en la tecnificación y modernización del distrito de riego.
Jesús Camacho dijo que este plan estratégico refleja la preocupación de los 2 niveles de gobierno por recuperar el medio ambiente, de ahí la pretensión de recuperar, también, un anillo verde de 6 hectáreas de bosque en los cerros del Águila, el de Quinceo y el Cerro de la Nieve, de la capital michoacana. Alertó que, de no reforestar, cada vez la precipitación pluvial será menor, lo que indudablemente afecta el almacenamiento en las presas.
También externó preocupación por las ollas de agua y señaló que el gobierno federal ya trabaja en el tema, lamentó que la ley de aguas nacionales no contempla el uso y aprovechamiento de las ollas, que en teoría, están diseñadas para captar agua de lluvia, además, informó que Conagua inspecciona y sanciona aquellas ollas que se alimentan de algún cuerpo de agua nacional, “si se capta de la lluvia, no podemos actuar”, agregó que se trabaja en coordinación con Semarnat en el tema de la regulación, porque con la retención se está modificando el ciclo del agua al no haber filtración, lo que además implica un cambio de uso de suelo.
Frente a los reclamos de los usuarios de riego, Camacho Pérez coincidió en que Morelia tiene que ser más eficiente en el uso del agua, ya que actualmente se pierde el 40 por ciento del agua que extrae, por lo que el Ooapas debe poner atención a las fugas de agua, para su recuperación. El municipio trata el 80 por ciento del agua, “ya les estamos diciendo que tienen que ir saneando toda su agua residual”, aunque lamentó que en pleno siglo XXI se descarga agua no tratada al Rio Chiquito.
Morelia, el gran contaminador
Agustín Pérez Villegas, comisariado ejidal de El Calabozo, exigió que Morelia limpie sus aguas y se pronunció por aceptar el proyecto, “si es real”; cuestionó por qué se intenta hacer un parche, cuando la solución está en tratar el agua que la capital ensucia.
Así, los hombres de campo acusaron a la capital michoacana como causante del “asesinato con alevosía y ventaja”, que consideran la contaminación del vital elemento, exigieron que Morelia limpie sus aguas, oponiéndose algunos a ceder agua a esa ciudad.
Martín Ramírez, comisariado de Téjaro de los Izquierdo dijo recibir “con mucha sorpresa y asombro” la noticia del proyecto en cuestión, demandó se saque a Morelia en los beneficios del proyecto, por ser esa urbe el principal contaminante, dijo que Morelia está obligada a tratar el agua y manifestó su oposición a darle agua a la antigua Valladolid-.
“A Morelia se le acabó el tiempo”, señaló determinante Felipe Calderón Chávez, quien acusó a la capital de ser el gran contaminador del valle, dijo que en Uruétaro ya se tiene un proyecto para saber qué tan mal está el agua de los pozos de la región y anunció que próximamente podrán demostrarlo.
El tarimbarense exigió al Presidente Municipal de Morelia, Alfonso Martínez, y al Ooapas, transparentar el recurso que cobran por el “supuesto” saneamiento que cobran a los morelianos y reinvertirlo en obras para el sector.
Cuauhtémoc Ramírez habló de ir revisando cómo se va a avanzar en el tratamiento del agua y enfatizó en la necesidad de entubar para que no se pierda el líquido y llegue el cien por ciento a los usuarios.
Precisó que la emisión de agua tratada alcanza mil 200 litros por segundo y un volumen similar sin tratar, su entubamiento permitirá transportar el 75 por ciento de los 2 mil 400 litros, por lo cual pidió los representantes de los módulos revisar el proyecto para ver la posibilidad de instalar 4 tubos en lugar de 3 contemplados, a fin de que se pueda transportar toda el agua tratada, y ver qué se puede hacer para aumentar la capacidad de tratamiento, informó que el proyecto se desarrollará por etapas, y exhortó a todos a empezar con la asignación de recursos aprobada, porque “tener ya el 75 por ciento de la obra es un gran avance”.
Adicionalmente, pidió a los módulos de riego apoyen en la instalación de la tubería, aprovechando la maquinaria que poseen, dijo que tanto Sader como Conagua, estarán pendientes de cómo hacer un uso racional del agua y hacer rendir el dinero a aplicar en este proyecto, en torno al cual se emitirá un decreto en breve, para proteger 6 mil hectáreas de bosque en Morelia.
La iniciativa incluye un esquema para monitorear vía satélite el cambio de uso del suelo, de tal forma que al detectar un cambio, se envíe un alerta a la Secretaría del Medio Ambiente con datos específicos de la ubicación, para aplicar sanciones severas por cambios ilegales en el uso del suelo; asimismo, se prevé otorgar certificados ambientales a las huertas de aguacate y otros cultivos, revisando periódicamente para detectar cambios, y en caso de haberlos habrá sanciones; así “se están dando pasos en serio, sobre cómo proteger los acuíferos y el ambiente”, sostuvo Ramírez Romero.
Alejandro “El Güero” Gámez, Presidente del Módulo de Riego Zacapendo, también demandó el tratamiento del 100 por ciento de agua y especificó que es tiempo de tomar medidas en lo concerniente a la tecnificación de los módulos de riego y el Distrito 020.
Se mostró complacido de que se respete el volumen de agua de la presa de Cointzio que por derecho le corresponde a los Módulos de Riego y que no se pretenda condicionar el uso del agua tratada que está concesionada a los mismos módulos.
La reunión fue sumamente trascendente, los tres módulos de riego que involucra la obra de la la línea de conducción hidroagrícola en el valle Morelia-Queréndaro representan a 80 ejidos y pequeña propiedad, a través de 13 mil 500 hectáreas y 4 mil 600 usuarios.