Con la justa exigencia de localizar a por lo menos una docena de personas desaparecidas, pobladores de Queréndaro realizaron una manifestación pacífica y el cierre temporal de la carretera federal para exigir atención de las autoridades.
Al lugar se presentaron elementos de la Fiscalía General del Estado para atender a los familiares de las víctimas, en tanto que la presidenta municipal de Queréndaro, Diana Caballero, recibió de manera personal al señor Moisés, padre de Rafael Basurto Pérez, desaparecido desde el pasado 31 de enero.


La alcaldesa expresó solidaridad con las familias de los desaparecidos y ofreció asesoría legal, así como acompañamiento en el proceso de búsqueda.
Los elementos de la FGE informaron, que, aunque hay avances “importantes” en las investigaciones, por protocolo solo la Fiscalía Especializada puede dar información a los familiares consanguíneos: padres, hermanos, hijos y conyugues.
Aunque el Gobierno Municipal de Queréndaro está impedido a intervenir y conocer de la carpeta de investigación que tiene a su cargo la FGE, Diana Caballero acordó con el señor Moisés otorgar todas las facilidades para dar seguimiento al caso de su hijo y acudir a la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas.
Cabe mencionar que Moisés Basurto fue el único pariente consanguíneo del grupo de manifestantes que accedió a dialogar con la alcaldesa.
Sobrinas de los hermanos Ricardo y Ramón Mendoza Ruiz, que fueron sacados de su domicilio el tres de febrero, así como otra sobrina de Adolfo Muñoz Gutiérrez, de quien no se sabe su paradero desde el 31 de enero, rechazaron dialogar con la Presidenta Municipal a pesar de que había la indicación de recibir a una comitiva, conformada por cinco familiares de los desaparecidos, en lugar de eso, los manifestantes optaron por cerrar la vialidad.

Cabe mencionar que los agentes de la FGE conocieron, en el lugar, de al menos otros dos casos de personas desaparecidas en Queréndaro, sin que hasta ahora se hayan presentado las denuncias correspondientes.
Las personas desaparecidas pertenecen a la cabera municipal y las localidades de El Castillo, El Calvario y Rio de Parras. Siete de las víctimas fueron levantas el tres de febrero, entre ellas dos mujeres, las hermanas María de los Ángeles y Berenice García Medina, de 32 y 34 años de edad respectivamente, ambas vecinas de la colonia Isaac Arriaga.
Ante el personal de la Fiscalía del Estado, la Presidenta Municipal, Diana Caballero, pidió a las autoridades no estigmatizar a los desaparecidos y hacer todo lo posible para regresarlos pronto y con vida a sus familias.
La alcaldesa dejo abierta la posibilidad de reunirse con los demás familiares directos de los desaparecidos para brindarles acompañamiento legal.














