A sumar esfuerzos, trabajar en unidad y dejar posturas ideológicas e intereses partidarios o de grupo, convocó el gobernador de Michoacán Silvano Aureoles, en el marco de la firma del Acuerdo para La Paz y Reconciliación, el cual el arzobispo de Morelia, Carlos Garfias Merlos, aseguró que la educación es la clave para la paz en medio del brote de la violencia que vive el país.
Ante familiares víctimas de los atentados de 2008 y representantes de diferentes sectores de la sociedad, de los tres poderes y órdenes de gobierno, el mandatario afirmó que el acuerdo es el inicio de un camino que se ha visualizado para construir un plan integral que haga frente a los retos de la época.
Señaló que uno de los mayores desafíos es el de combatir el alto consumo de estupefacientes que está envenenando a nuestras niñas, niños y jóvenes, “que son el tesoro más valioso que tenemos como sociedad”.
Se dijo preocupado que más del 90 por ciento de las personas privadas de la vida den positivo en el consumo de distintas drogas, por ello la importancia de sumar esfuerzos.
En su turno, el responsable del Plan de Paz de la Iglesia Católica, Carlos Garfias Merlos, Arzobispo de Morelia y Vicepresidente del Episcopado Mexicano, señaló que se debe educar para la paz, fomentando valores y sobre todo en la prevención del delito, de las adicciones y de todas las expresiones que agreden, enfocándonos principalmente en niños y jóvenes. El secretario de Gobierno, Carlos Herrera Tello, durante su intervención aseguró que el éxito de una estrategia para abatir la violencia en cualquier lugar, requiere la unidad y participación de la sociedad.