El Senado de la República aprobó por 112 votos un dictamen para declarar el 29 de septiembre de cada año, como el “Día Nacional del Maíz”, ya que esta planta representa el pilar de la alimentación mexicana y una manifestación cultural de origen ancestral.
El documento precisa la necesidad de emprender acciones legales especiales para el fomento del maíz como una planta de valor cultural, alimentario y económico nacional.
Señala que a pesar de que en las comunidades se mantienen las tradiciones de selección y conservación, el mercado llega con sus propios estándares de medición, selección y de acaparamiento de la producción. “Con ellos también, el abaratamiento de las cosechas locales y el incremento de precios de las semillas genéticamente modificadas”.
Respecto al ámbito internacional, el dictamen refiere que México se encuentra ubicado en el quinto lugar de producción del grano en el mundo, al ofertar el 2.2 por ciento, con 21.6 millones de toneladas en promedio y una tasa de crecimiento de 2.0 por ciento.
Así mismo, se precisa que, del total de maíz producido en México, el 57 por ciento es destinado para el consumo humano, 29 por ciento para el consumo animal y 20 por ciento para la industria.
Los principales productores son: Sinaloa, con 26 por ciento, Jalisco, con 12.6 por ciento, Estado de México 6.5 por ciento, Chiapas 6.0 por ciento, Michoacán 5.9 por ciento y Veracruz 5.7 por ciento.
El presidente de la Comisión de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural, José Narro Céspedes, expresó que es muy importante para México rescatar la autosuficiencia alimentaria y por ende al maíz, como el principal alimento de la población y parte de su cultura e historia del país.
Destacó que se reconocen 300 variedades, derivadas de 64 razas de maíces nativos en el territorio mexicano. Es un grano que se domesticó, que se ha dispersado y es parte de la riqueza del país desde hace más de 10 mil años.
La presidenta de la Comisión de Estudios Legislativos, Segunda, Ana Lilia Rivera Rivera, dijo que 2.3 millones de productores lo siembran en México, sobre todo, campesinos “temporaleros”, que sin programas o presupuestos alimentan al país con su “semilla sacrificada”.
Subrayó que es fundamental que el Estado adopte medidas especiales para la protección del maíz y lo relativo a las prácticas tradicionales para su producción, comercio y consumo.
En tanto, la senadora del PAN, Xóchitl Gálvez Ruiz, destacó que debe fortalecerse la agricultura tradicional, porque México es el país que le aporta al mundo esta semilla. “En un país como el nuestro”, con una amplia diversidad de comunidades y pueblos, todos coinciden “en que estamos hechos de maíz”.
La senadora Jesusa Rodríguez Ramírez, de Morena, dijo que es de celebrarse la lucha de resistencia que dan las campesinas, campesinos y pueblos indígenas para preservar esta semilla. “Hemos recibido este patrimonio para conservarlo y mejorarlo”.
En tribuna, el senador del PRD, Antonio García Conejo, dijo que es fundamental apoyar toda legislación que le dé relevancia al maíz. Hablar de esta semilla es referirse a lo más profundo de las raíces mexicanas, la llevamos en el corazón y en el alma.
Por su parte, el senador del PAN, Gustavo Enrique Madero Muñoz, expresó que es pertinente el llamado a cuidar la cultura, los valores y el patrimonio que representan las semillas originarias. Debe protegerse y tutelarse en la legislación el equilibrio entre el maíz originario y la agricultura comercial, ese es el reto.
Por el Grupo Parlamentario del PRI, el senador Mario Zamora Gastélum, advirtió que en la iniciativa de presupuesto para el 2020, viene una importante reducción para la comercialización de este producto. “La relevancia e importancia del maíz se debe ver reflejada en el presupuesto”, expresó.
Finalmente, el senador de Morena, Félix Salgado Macedonio, dijo que no debe quedarse solamente en una declaratoria, sino legislarse para reactivar la economía del campo y darle un verdadero precio y garantía a esta semilla. “Es nuestro alimento sagrado y de ahí derivan un sinfín de productos”.