En el marco de la visita que sostendrá el presidente Andrés Manuel López Obrador a tierras michoacanas, los diputados Sergio Báez Torres, Antonio de Jesús Madriz Estrada, Fermín Bernabé Bahena, Alfredo Ramírez Bedolla y las legisladoras Cristina Portillo Ayala y Tere López Hernández, anunciaron que solicitarán al mandatario federal que la Secretaría de Hacienda intervenga evaluando la viabilidad financiera de la contratación de la deuda pública que “de manera ilegal” un grupo de diputados le aprobaron al ejecutivo a finales del año pasado.
“Hemos sostenido que nos asiste la razón jurídica en nuestra lucha contra esta determinación, pero es necesario demostrar que también tenemos razones económicas para oponernos”, señalaron.
Dijeron que, si bien la contingencia sanitaria ha puesto en jaque las finanzas públicas de los tres órdenes de gobierno, “no debe ser comprometiendo el futuro de las siguientes generaciones como debe atenderse la emergencia actual”.
Se manifestaron entonces por un programa de austeridad de alto impacto en las finanzas de Michoacán. “Consideramos que hay mucho por hacer en materia de calidad del gasto público antes que insistir en la salida fácil de contraer más deuda”.
“Michoacán se encuentra dentro de los 12 estados más endeudados del país y estamos por encima de la media nacional en la deuda como proporción del PIB estatal. Del mismo modo somos uno de los estados que paga una de las tasas de interés promedio más altas entre todas las entidades federativas”, señalaron los legisladores citando un informe de la Auditoria Superior de la Federación del año 2019; por lo que, derivado de estos datos, advirtieron riesgos de mayor deterioro de las finanzas públicas.
Finalmente señalaron tener dudas sobre el verdadero destino de los fondos que, a través de estos empréstitos, llegarán al gobierno estatal. “Tienen un tufo electoral, eso es innegable. Para ello el gobierno del estado ha desplegado una estructura de operación política electoral a través de los denominados Jefes Regionales de Gobierno y no dudamos que los recursos de la deuda sean utilizados para aceitar esta maquinaria. Sin embargo, no nos asusta este tipo de estrategias que apelan a la compra de voluntades”, concluyeron.