El 2020, es un año que muchas familias no quisieran recordar, porque ha sido un año de muerte y de terror en nuestro país, hasta el día 20 de diciembre, se contabilizaban 159 mil 065 decesos, sólo a causa del COVID 19 y por los homicidios dolosos registrados, la cifra más alta que representa un nuevo récord que para nada es para presumirse…
Y este fin de año, los casos de contagios se han acentuado aún más; las fiestas navideñas y el Día de Reyes, es una ocasión propicia para que el virus se propague, por lo anterior, es necesario una mayor conciencia de las y los ciudadanos, para evitar realizar fiestas y reuniones masivas.
Por lo anterior, sorprende que la autoridad federal, algunos Gobiernos estatales y muchas autoridades municipales, no tomen en serio su responsabilidad para frenar u organizar de manera diferente a los mercados sobre ruedas, centros comerciales y bares, en donde hay cancha abierta…
Lo cierto es que el Gobierno de la República, ha sido incapaz e irresponsable para tomar la batuta y el control, para frenar los casos de contagios de esta pandemia, las medidas tomadas han sido insuficientes y hasta condescendientes…
Hasta este 20 de diciembre, las muertes por el COVID 19 en el país, sumaron 118 mil 202 fallecidos, además de 401 mil 293 casos detectados como sospechosos y a la fecha se tiene un registro de un millón 320 mil 545 contagios…
La esperanza de México, se han convertido en muerte, llanto y desesperanza, al sumarse también 40 mil 863 decesos por homicidios dolosos, sólo en este año, la cifra más alta y nuevo récord de violencia en México; lo cual contrasta con los 37 mil 315 homicidios dolosos registrados en 2019.
Y todavía nos preguntamos: ¿hay algo que festejar este 2020?… ¿Cuántas muertes más se sumarán hasta los primeros días de enero del 2021?… Acaso no hemos entendido que es mejor quedarse en casa, no hay nada que celebrar ni festejar, es tiempo de reflexionar, de preservar la vida y agradecer al creador, que aún estamos aquí…
Por hoy es todo amigas y amigos, hasta la próxima….