Si bien Queréndaro se distingue por el buen mezcal, que se produce en las vinatas de la parte alta, el perlado y su alta graduación son extremas cualidades que cuida celosamente Jorge Pérez Escalante, reconocido maestro mezcalero en Río de Parras.
Aunque de graduación alta el destilado es generoso, la calidad del mezcal es el sello de Mezcalante, de ahí su alta demanda en la zona, pues es un tesoro escondido como si se tratara de un cofre lleno de perlas.
Miguel y su esposa Ariana Lizbeth Roldán producen su propia marca, Espina Roja, con la que han comenzado a explorar el mercado en la capital michoacana. Destilados de almendra, pechuga de pavo, coyote y armadillo, así como abocados de víbora, son parte de la cava exclusiva que aquí se produce.
La vinata data desde el bisabuelo, esta familia vive exclusivamente de la producción del mezcal, por lo que ya innovan, también, con diversas cremas de mezcal que son excelentes digestivos.
Desde El Castillo, Río de Parras y el Real de Otzumatlán las vinatas de mezcal son parte del paisaje de esta sierra, incluidos los hornos de cocción con piedras de río, la leña apilada y los alambiques de cedro.
La mano franca y generosa de quienes aquí habitan invita a regresar pronto para degustar un dedal de mezcal.