Al iniciarse los trabajos de colocación de la estructura que emularán los arcos de acceso al municipio de Cuitzeo, la movilidad del Pueblo Mágico colapsó y generó malestar e inconformidad entre ciudadanos y automovilistas.
La tarde de este lunes, la circulación de vehículos en la cabecera municipal se vio seriamente afectada, como consecuencia de las tareas de armado de la mole de acero en la que se montarán los arcos y el letrero de Bienvenida a la ciudad, proyecto desarrollado por la actual administración.
Decenas de camiones y automóviles circulaban a marchas forzadas por las estrechas calles de la localidad, lo que generó retrasos hasta de una hora a quienes pretendían no solo cruzar la localidad, sin desplazarse de un punto a otro.
La situación más caótica se enfrentó específicamente en el entronque que va hacia las tenencias de San Agustín y Mariano Escobedo, donde a decir de los habitantes, las autoridades municipales no informaron por ningún medio de la ejecución de esas maniobras.
Propietarios de múltiples negocios y comerciantes, señalaron que debido a que el flujo vehicular fue desviado por diferentes calles, se propició un enorme embotellamiento.