Cada 9 de septiembre conmemoramos el Día Mundial de la Agricultura, una fecha que nos invita a reflexionar sobre la importancia de quienes, con esfuerzo diario, hacen posible que los alimentos lleguen a nuestras mesas. Detrás de cada fruta, verdura o grano que consumimos, hay historias de agricultores y trabajadores del campo que dedican su vida a cultivar con pasión y compromiso.
La agricultura no solo es el motor del campo, también es la base de la seguridad alimentaria y el desarrollo económico que sostiene a miles de comunidades. En México, miles de familias dependen de la producción agrícola para su sustento, generando empleos, riqueza y bienestar en las regiones productoras.
Cada semilla sembrada, cada cosecha levantada, refleja el esfuerzo colectivo de hombres y mujeres que trabajan bajo el sol y la lluvia. En este panorama, el aguacate de México se ha consolidado como uno de los productos agroalimentarios más importantes de México, no solo por su impacto en la economía, sino también en la cultura y en la proyección internacional del país.











