Guardianes del maíz comparten buenas prácticas

Productores y técnicos caminan juntos por una transición agroecológica en el marco de de la conferencia 29 del Ciclo Autosuficiencia Alimentaria e Innovación Tecnológica, denominada Maíces Nativos de la Sierra Madre Occidental

En el marco de la conmemoración del Día Nacional del Maíz, la Secretaría de Agricultura realizó la conferencia “Maíces nativos de la Sierra Madre Occidental”, en el que participaron productores, científicos y técnicos agroecológicos y sociales de Producción para el Bienestar de Chihuahua, Sinaloa, Nayarit, Jalisco y Michoacán.

Los participantes compartieron su experiencia y manifestaron su beneplácito al caminar de la mano con el Programa Producción para el Bienestar para dejar de lado los agroquímicos por prácticas sustentables y poder cuidar la tierra “que tanto nos ha dado”.

El subsecretario de Autosuficiencia Alimentaria de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, Víctor Suárez Carrera, destacó que la Sierra Madre Occidental cuenta con un valioso tesoro que para muchos está invisibilizado, pero que ofrece sustento, trabajo, cultura y alimento: son los maíces nativos, que se expresan con gran diversidad, en forma paralela y estrecha con la diversidad de nuestros pueblos indígenas.

Los participantes hablaron de los maíces locales de cada zona y de su importancia socioeconómica y cultural. Destacaron la persistencia de maíces nativos por generaciones, que ocurre gracias al trabajo continuo de selección por parte de los campesinos.

El subsecretario destacó que México es la nación con la mayor riqueza biológica de maíz, al contar con unas 60 razas nativas.

Expuso que es común que liguemos al maíz con el centro y sur de la República, pero en realidad esta riqueza está presente en todo el territorio nacional, ya que todo el país es centro de origen, diversificación y domesticación continua. Por ello esta conferencia buscó visibilizar la riqueza escondida de la Sierra Madre Occidental, agregó.

EL ACOMPAÑAMIENTO TÉCNICO

Víctor Suárez destacó que Producción para el Bienestar, por medio de su Estrategia de Acompañamiento Técnico, ha establecido un método virtuoso de vinculación entre técnicos agroecológicos y sociales, científicos y productores del campo.

“Esta vinculación se da sobre la base del respeto a los productores, a través de un diálogo de saberes. El campesino está en el centro de todo y lo que buscamos es apoyarlo, a su comunidad, a sus movimientos y a sus redes, con una labor de fomento productivo con orientación de transición agroecológica para dejar atrás la revolución verde con uso excesivo de agroquímicos y deterioro de recursos naturales. La agroecología es el camino para seguir valorizando nuestros maíces y a la agricultura en su conjunto”, indicó.

La coordinadora de Agrobiodiversidad de la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio), María Francisca José Acevedo Gasman, habló de los diversos proyectos y acciones que en la institución se realizan para contribuir a la preservación de los maíces nativos de México, como los proyectos Global de Maíces y el de Valoración de Maíces.

Propuso una serie de recomendaciones de política pública, como el que se promueva la transición a prácticas más sustentables en la producción de maíz en general o el que los temas relacionados con la producción de maíces deben ser diferenciados, al tomar en cuenta que existen sistemas de producción diversos, cada uno con diferentes dependencias e impactos sobre los servicios ecosistémicos.

MERCADO DIFERENCIADO PARA EL MAÍZ

Francisca José Acevedo planteó que los mercados deben diferenciar, valorar y reconocer las variadas fuentes y atributos de los sistemas de producción de maíz, así como de sus productos resultantes.

Afirmó que se requiere más inversión pública para la generación de datos específicos ligados a los sistemas de producción de maíz y que las razas de maíces deben ser parte del foco del mejoramiento de la mejora agronómica.

Consideró que se requiere un esfuerzo decidido a nivel mundial para fortalecer los procesos de conservación in situ que complementen los esfuerzos ex situ en el marco del dominio público.

 HERENCIA MILENARIA

El integrante de la Estrategia de Acompañamiento Técnico de Producción para el Bienestar, Francisco Hernández Archundia, recordó que el maíz fue domesticado en Mesoamérica a partir de sus parientes silvestres (teocintle) hace unos diez mil años, en procesos paralelos realizados por mexicas, mayas, zapotecas, mixtecas, purépechas, totonacas, mazatecas, chinantecas, zoques y otros pueblos indígenas.

Así quedó de manifiesto cómo productores y técnicos caminan juntos por una transición agroecológica y las buenas prácticas que hoy se desarrollan en diversos puntos del país mediante la aplicación de microorganismos, fertilizantes a base de micorrizas, lombricomposta y otros proyectos para la conservación de maíces nativos con campos comunitarios de semilla criolla.

“Los productores de las comunidades estamos teniendo otra vez esa confianza en el gobierno”.