Recuperar el papel regulador del Estado, reorientar programas y mecanismos de entrega de apoyos directos a los productores, manejar los recursos con transparencia y rendición de cuentas, y combatir la corrupción, son parte de las directrices en la transformación de la política agropecuaria y pesquera de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), impulsada por el Gobierno de México.
Así lo afirmó el titular de Agricultura, Víctor Villalobos Arámbula, quien aseguró que en esta administración se redujeron programas y simplificaron sus mecanismos de operación, se reestructuró la Secretaría y se aplica una reingeniería de la Banca de Desarrollo Rural, todo ello enfocado a revertir el rezago del campo y reducir la dependencia alimentaria.
Durante su participación en el Primer Consejo Directivo de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra), el secretario Villalobos Arámbula señaló que esta misión requiere de la participación de todos los sectores, incluido el privado y sus organizaciones, con la perspectiva de que la agricultura debe ser eje de desarrollo nacional y fuente de bienestar colectivo.
En su ponencia magistral: “La política agropecuaria y pesquera mexicana”, el funcionario federal indicó que entre los principales retos que enfrenta el campo están incrementar la inversión en ciencia, innovación y transferencia de tecnología, fomentar alianzas público-privadas y seguir posicionando los productos mexicanos en los mercados internacionales.
Ante los representantes del sector empresarial del país, dio a conocer que, entre los logros del primer año de gestión, resultado del trabajo de todos los productores, resalta el crecimiento de las actividades primarias durante el tercer trimestre de 2019 en 5.4 por ciento, respecto al mismo periodo de 2018.
También, destacó el superávit de ocho mil 315 millones de dólares que presentó la balanza comercial agroalimentaria para los primeros once meses de 2019, superior en 48.3% a lo reportado durante el mismo periodo de 2018.
Para el mismo lapso, las exportaciones alcanzaron los 34 mil 619 millones de dólares, presentando un crecimiento anual de 8.6%, agregó.
En 2019, los programas Producción para el Bienestar, Precios de Garantía y Crédito Ganadero a la Palabra canalizaron 21 mil 891 millones de pesos, en beneficio de 2.2 millones de productores, comentó.
El presidente de la Canacintra, Enoch Castellanos Férez, mencionó que el organismo empresarial que representa es un aliado para enfrentar los retos en el sector agroalimentario, como son mejorar los ingresos a los trabajadores del campo, en donde la industria de la transformación tiene mucho que aportar.
Un reto y paso importante para ello, refirió, es otorgar valor agregado a las actividades del campo, lo que significa pasar de la actividad primaria a la agroindustria, con el objetivo de obtener mejores ingresos a lo largo de toda una cadena.
Destacó la oportunidad de participación en el financiamiento para maquinaria, equipo agrícola y material vegetativo, lo que permitirá avanzar en conjunto por una agricultura que reparta la riqueza y contribuya a superar la pobreza en el medio rural.