La lucha por un precio de garantía justo para el maíz ha tomado un giro de indignación y decepción para los productores de la región. Durante una asamblea en la comunidad de Tzintzimeo, municipio de Álvaro Obregón, los agricultores descubrieron con sorpresa y enojo montones de toneladas de maíz podrido, un grano que en su momento fue adquirido por Segalmex (Seguridad Alimentaria Mexicana) a pequeños productores como parte del programa Precios de Garantía.
El fétido olor del grano a la intemperie generó una ola de molestia entre los labriegos, quienes, además de exigir un precio que les permita vivir dignamente de su labor, buscan que se valore y se dimensione su trabajo, al ser ellos quienes proveen de alimento al país. La situación fue documentada y difundida a través de un video en redes sociales por el ex presidente municipal de Queréndaro, Temo Solis, mostrando los grandes montones de maíz echado a perder en el patio del antiguo Centro de Acopio Asteca, popularmente conocido como “Los Globos”.
Este maíz abandonado y podrido corresponde específicamente al Ciclo Primavera-Verano 2023, según afirman los propios productores. Su indignación es aún mayor porque, en el ciclo agrícola más reciente, el programa de Precios de Garantía del ahora llamado “Alimentación para el Bienestar”, no operó de manera efectiva en la zona, o al menos ninguno de ellos fue beneficiado, lo que les ha generado una doble afectación económica.
Esta lamentable situación se suma a las continuas pérdidas económicas que han enfrentado los productores durante los últimos tres ciclos agrícolas, haciendo su actividad insostenible. Los agricultores, provenientes de regiones como el Valle Morelia-Queréndaro, la Cuenca del Lago de Cuitzeo y el Bajío Michoacano, han alzado la voz no para pedir subsidios, sino para exigir un precio justo que cubra sus costos de producción y les deje una ganancia razonable.
En 2023, los productores vendieron su cosecha a un precio neto por tonelada por debajo de los 5 mil pesos, mientras que sus costos de producción por hectárea ascienden a cerca de 50,000 pesos. A pesar de que el gobierno ha anunciado un precio de garantía de 6,000 pesos por tonelada para el ciclo 2024-2025 para pequeños productores, esta cifra es inferior a los 6 mil 965 pesos que Segalmex pagó a nivel nacional en 2023, lo que representa una pérdida de poder adquisitivo dada la inflación.
Ante la falta de resultados en sus diálogos con autoridades, los productores han decidido buscar un acercamiento directo con la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, durante su próxima visita a la región. Han unido fuerzas con sus homólogos de Jalisco, Guanajuato y Sinaloa para formar un frente común y hacer que el gobierno federal escuche sus demandas.
El hallazgo del maíz podrido no solo simboliza el desperdicio de un recurso vital, sino también la urgencia de atender una crisis que ha sido ignorada por años y que amenaza la seguridad alimentaria de la nación.
