Con un primer grupo de 20 adultos mayores Santa Ana Maya se sumó al Programa de Palomas que, a poco más de dos años de operación, ha reunido a más de 8 mil 500 personas con sus familiares en Estados Unidos.
El Presidente Municipal, Juan Audiel Calderón Mendoza, agradeció al Gobernador Silvano Aureoles Conejo y al titular de la Secretaría del Migrante, José Luis Gutiérrez, por el apoyo otorgado en el trámite de las visas para que los santanamayeneses puedan visitar a sus hijos y nietos tras décadas de no verse.
El edil acompañará a este primer grupo conformado por Ma. Julia Abrego, Nicolasa Ávila, Ma. Eliza Bernabé, Reyna Bernabé, Juliana Calderón, Serafín Pérez, Guadalupe Contreras, Efrén López, Petra Cortez, Graciela Ferreira, Belem López, María Blanca López, Concepción López, Virginia López, Nicolás Rodríguez, Teresa Martínez, Ma. Celia Quintana, Ma. Inés Rodríguez, J. Santos Rodríguez y Ma. del Carmen Silva, oriundos de la cabecera y las localidades de Huacao y Puerto de Cabras.
Audiel Calderón junto con Juan Carlos Flores Pérez, coordinador de Atención al Migrante de Santa Ana Maya, hicieron entrega de las visas a cada uno de los beneficiarios, quienes este sábado 12 de octubre volarán a Oakland, California, para retornar el próximo tres de noviembre del año en curso.
Juan Carlos Flores informó que ya se alista un segundo grupo , que de igual forma tendrá como destino el estado de California.
El secretario José Luis Gutiérrez reconoció la disposición del Presidente Municipal para darle esperanza a gente como doña Nicolasa, que desde hace 20 años no ve a sus hijos, o como Petra Cortez que a sus 78 años de edad tiene la esperanza de abrazar a sus nietos.
En el encuentro semanal con la prensa, el gobernador Silvano Aureoles hizo referencia a Palomas Mensajeras como el programa de “la esperanza de muchas familias”.
“Muchas veces hacemos la gestión pensando en que puedan ir una temporada, pero corren con suerte y les dan la visa por 10 años, casi a la mayoría, eso ya les facilita en seguir yendo a visitar a sus familiares, es algo muy humano, muy bonito”.
Gracias a este programa –dijo- son miles y miles de familias que han podido rencontrarse, principalmente en California, Illinois, Chicago y Washington, que es donde más migrantes hay, sobre todo michoacanos.