Ante la complejidad climática que se ha manifestado cada año como la escasez de lluvias en el periodo de éste 2023, en cada temporada es importante la búsqueda de alternativas sustentables expusieron productores del campo de los 13 municipios que conforman la región Cuitzeo, en su asistencia al Segundo Foro Regional, con el tema “Rescate de Cereales y Valor agregado”.
Fue en la plancha de la plaza Ignacio Zaragoza, en Álvaro Obregón, donde se dieron cita productores de diferentes productos de los municipios de Morelia, Indaparapeo, Queréndaro, Tarímbaro, Copándaro, Santa Ana Maya, Huandacareo, Cuitzeo y Chucándiro, para escuchar las diferentes ponencias a las que también asistió el alcalde Fernando Sánchez Juárez.
El foro fue encabezado por el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Cuauhtémoc Ramírez Romero.
La casi nula caída de agua por medio de la lluvia fue el tema más resaltado de los productores de maíz que tuvieron en determinado tiempo que cambiar la productividad por alfalfa o garbanzo, quienes se dieron cuenta a tiempo de que las lluvias escasearían para el temporal, pero para quienes pensaron que el clima les daría una nueva oportunidad, lo perdieron todo.
También hubo quienes al aprovechar sus tierras en la siembra, le apostaron a otras alternativas como la apicultura para la producción de miel y sus derivados, como el caso de Indaparapeo, mientras que en Morelia, el caso de la tenencia de San Nicolás de Obispo, le dieron valor agregado al maíz, con productos como el pinole.
Además, se aprovechó a los chapulines para elaborarlos de diferentes formas, una de ellas a manera de botana, con sal y limón, también con chile, sin abandonar su esencia artesanal de los molcajetes, tallados a base de piedra volcánica.
Queréndaro, con sus chiles tradicionales en diferentes especies que se han caracterizado por su aroma, sabor y color, además del tratamiento que centenariamente se le da al producto y cuenta con una fuerte demanda regional, nacional e internacional para la elaboración de diversos platillos típicos mexicanos, entre el mole, las enchiladas y algunos derivados.
De Santa Ana Maya, se contó con sus tradicionales Quesadillas, consistentes en una suave galleta cubierta de cajeta, de un sabor único que, afirman, es receta secreta heredada más allá de la mamá, de los abuelos y bisabuelos, lo que hace referencia a una enorme tradición con grandes historias.