Una fuerte explosión sacudió ayer sábado, 6 de diciembre de 2025, el municipio de Coahuayana, dejando un saldo de cinco personas fallecidas y siete heridas, en un suceso que ha provocado la inmediata reacción de los tres niveles de gobierno. El incidente ocurrió alrededor de las 11:40 horas, justo afuera de las instalaciones de la Policía Comunitaria de la localidad.
Hoy, en una rueda de prensa conjunta, el secretario de Gobierno, Raúl Zepeda Villaseñor, y el fiscal General de Michoacán, Carlos Torres Piña, detallaron la activación de un protocolo de reacción inmediata que involucró la coordinación de fuerzas federales y estatales para atender la emergencia.
El secretario Zepeda Villaseñor informó que, tan pronto como se tuvo conocimiento del hecho, la Secretaría de Seguridad Pública movilizó sus ambulancias aéreas de Protección Civil para el traslado y la atención urgente de los heridos. Destacó la rápida colaboración con la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), la Secretaría de Marina (SEMAR), la Fiscalía General del Estado (FGE) y la Secretaría de Seguridad Pública Estatal.
Subrayó que las víctimas civiles se encuentran fuera de peligro, siendo únicamente dos heridos con atención médica y estables. Además, instituciones como la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas del Estado, la Comisión Estatal de Derechos Humanos y la Subsecretaría de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobierno se trasladaron a Coahuayana para brindar apoyo psicológico y médico a las familias afectadas.
Esta mañana, el Gobernador se trasladó personalmente al municipio para verificar la situación, ofrecer apoyo directo a las víctimas y sus familias, y evaluar los daños a los locales comerciales afectados, los cuales recibirán asistencia del Gobierno del Estado. El mandatario también encabezó una reunión de seguridad con las Fuerzas Armadas Federales y las dependencias estatales para coordinar acciones en torno a la investigación y la seguridad municipal.
Por su parte, el fiscal Carlos Torres Piña confirmó que la Fiscalía General de la República (FGR) ha atraído el caso, enfocando su investigación en la causa de la explosión, los productos utilizados y el uso de explosivos.
La Fiscalía de Michoacán y la Secretaría de Seguridad Pública Estatal coadyuvarán con la FGR en la elaboración de peritajes relacionados con las personas fallecidas, heridas y los daños estructurales.
El fiscal detalló que, hasta la tarde de este domingo, se contabilizan cinco víctimas mortales: tres de ellas identificadas como miembros de la Policía Comunitaria y ya entregadas a sus familiares. Las dos víctimas restantes aún no han sido identificadas, presumiéndose que al menos una de ellas sería la persona que conducía el vehículo que transportaba los supuestos explosivos.
Los primeros peritajes revelan que los daños por la explosión se extendieron hasta trescientos metros lineales de manera horizontal y cincuenta metros verticales, afectando inmuebles, las propias instalaciones de la Policía Comunitaria y negocios aledaños. Se reportó también la afectación a doce vehículos dañados. Se informó que las viviendas y negocios recibirán apoyos económicos.
Finalmente, Torres Piña mencionó que las revisiones indican que la camioneta Dakota negra, presuntamente utilizada para transportar los explosivos, ingresó al estado en la mañana del sábado, alrededor de las 8:30 horas, proveniente de Colima, para luego transitar por la carretera 200, cruzar el puente Coahuayana, pasar por la comunidad de San Vicente y Coahuayana Viejo, antes de accionar el suceso. El trabajo de investigación en la zona se reanudó al amanecer de hoy, domingo, dividiendo el lugar en polígonos de trabajo entre la SEDENA, la FGR y la FGE.
