La Secretaría de Desarrollo Rural y Agroalimentaria (SEDRUA) no ha recibido reportes de cultivos siniestrados a causa de las lluvias que se han registrado en los municipios que conforman el Valle Morelia-Queréndaro, la cuenca del Lago de Cuitzeo y el bajío michoacano; hasta ahora las lluvias han sido benévolas con los agricultores michoacanos, a excepción de 4 mil hectáreas de maíz, camote y guayaba que se perdieron por inundaciones y vientos fuertes en municipios de la Ciénega, informó la secretaría a cargo de Rubén Medina Niño en Michoacán.
En términos generales el diagnóstico es alentador para la agricultura estatal, sobre todo porque, de perder sus cosechas, los labriegos no recibirían indemnizaciones, ya que la Secretaría de Desarrollo Rural (SADER) canceló los seguros agrícolas que garantizaban la recuperación parcial o total de daños por fenómenos meteorológicos, quedan vigentes solo los seguros enfocados a las sanidades, vegetal y animal, el resto de los seguros catastróficos se cancelaron pretextando prácticas de corrupción en la SAGARPA, antecesora de SADER.
El panorama es bueno también en Tarímbaro, donde José Ángel Vieyra Ortiz, secretario de Desarrollo Rural en el municipio, celebró el que lluvias y tormentas registradas en esta zona han sido positivas para el campo, que a nivel local destaca por la producción de hortalizas, además del maíz y la floricultura, pues los campesinos aprovechan la celebración de Día de Muertos para producir flores en variedades que se utilizan para adornar sepulcros durante el 1 y 2 de noviembre. “Ha llegado alguna que otra granizada, pero sin consecuencias; estamos agradecidos con la lluvia que nos ha favorecido y al parecer seguirá por ese buen camino”, consideró.
El panorama contrasta totalmente con el año pasado, cuando la sequía y heladas ocasionaron grandes pérdidas a los agricultores y sus familias, salvándose solamente un 30 por ciento de la producción que normalmente se registra durante la temporada de lluvias; en muchas parcelas hubo doble siembra, ya que en un intento por recuperarse de las pérdidas en la cosecha de maíz a causa de la sequía, la gente optó por cultivos alternativos, que también se perdieron a causa de las heladas que se presentaron en octubre.
“Sin embargo, este año el temporal llegó totalmente diferente y vamos por muy buen camino, hoy tenemos más beneficios que perjuicios”, estableció el funcionario. Cuestionado sobre la cancelación de seguros que cubrían pérdidas por contingencias en el campo, José Vieyra dijo que efectivamente la gente del campo está “un tanto olvidada por las autoridades en ese sentido”, pero mencionó que el Ayuntamiento ha ayudado en gran medida a los agricultores locales, quienes tuvieron el apoyo de don Balta Gaona y tras su fallecimiento también el de su hijo Eric, mediante programas de semilla y fertilizante a bajo costo para todos los campesinos de Tarímbaro.