Por primera vez en la historia, la cabecera municipal de Zinapécuaro se convirtió en la sede del desfile y baile de los Toritos de Petate.
Cientos de familias se congregaron por las calles de la ciudad para presenciar el espectáculo que era además amenizado por carros de sonido o bandas de viento…
Entre risas y admiración de la concurrencia, las comunidades y colonias participantes en el desfile de los Toritos de Petate que precede al martes de Carnaval, incluso mujeres, jóvenes y hombres bailaron junto a las coloridas creaciones.
Pese a que el sol caía a plomo, por puertas y ventadas de viviendas o comercios del centro de la ciudad, la gente dejaba de realizar sus actividades para disfrutar de la música y los bailables…
Las agrupaciones concursantes, en su mayoría de La Estación Querendaro, donde tradicionalmente se realizaba este desfile de Toritos de Petate, mostraron espectaculares diseños y una gran participación de bailadores, hombres disfrazados de mujer que capoteaban al “toro”, esa vistosa bestia que arrancaba admiración, risas y sorpresa entre los más pequeños.
Para el desarrollo del desfile, el alcalde de Zinapécuaro, Alejandro Correa, dispuso de un discreto operativo de seguridad que permitió el desarrollo del desfile en armonía y tranquilidad para las familias.
Ciudadanos entrevistados al respecto señalaron que se trata de una tradición que debe cuidarse, pero también que no debe pervertirse con actos que desaten violencia, como a ocurrido en otros años en otras localidades. Aquí, en la cabecera municipal de Zinapecuaro, es la primera vez que vemos un espectáculos de Toritos de Petate, al menos de este tamaño; ojala y se siga realizando, pero sobre todo que se le brinde oportunidad a niños y adultos mayores de participar, como esta vez se hizo a través del DIF, señaló José Juan Rangel, vecino de la localidad.