Guadalajara, Jalisco — En un encuentro que congregó a los principales productores de maíz de varios estados, el campo mexicano lanzó un ultimátum al secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Julio Berdegué Sacristán: o se resuelven las problemáticas que aquejan al sector o exigirán su renuncia. El anuncio se dio en el marco del Cuarto Congreso Internacional Agroalimentario en Guadalajara, donde representantes de Sinaloa, Nayarit, Jalisco, Guanajuato y Michoacán unificaron sus voces en el denominado Frente Nacional para el Rescate del Campo Mexicano.
La exigencia principal es la intervención del gobierno federal para garantizar la rentabilidad y sostenibilidad del sector agrícola. Los productores, incluyendo delegaciones de la región de Pastor Ortiz y del Valle Morelia-Queréndaro en Michoacán, argumentan que las políticas actuales han abandonado a los agricultores de mediana y gran escala, a quienes catalogan erróneamente como “productores comerciales”.
El sector denuncia una disminución en la rentabilidad y productividad desde el inicio de la actual administración. Cifras oficiales indican que México importa actualmente la mitad del maíz que consume, lo que evidencia un déficit en la producción nacional.
Los productores sostienen que el Gobierno de México ignora esta realidad, creando la falsa impresión de que los problemas del campo están resueltos, enfocándose únicamente en los pequeños productores de menos de cinco hectáreas, donde además, señalan, la corrupción es un problema grave.
En respuesta a esta situación, el Frente Nacional para el Rescate del Campo Mexicano anunció que la próxima semana celebrará un foro con economistas de la UNAM. El objetivo es fundamentar técnicamente sus propuestas antes de presentarlas formalmente a las Comisiones de Agricultura de la Cámara de Diputados y la Cámara de Senadores.
Los productores extienden una invitación verbal al secretario Berdegué para que asista a dicho foro, demostrando su disposición a colaborar con el gobierno si este se compromete a resolver el problema de la rentabilidad. Subrayan que son el eslabón más débil en la cadena de suministro y que la atención inmediata del gobierno es crucial para asegurar la soberanía alimentaria del país. De lo contrario, advierten que la exigencia de la renuncia del secretario será su siguiente paso.













