El 2022 será un parte aguas para los fieles del Señor de Araró. La llegada de la imagen Vicaria, réplica de la milagrosa imagen, a la iglesia de San Pedro y San Pablo volvió a mover la fe y los corazones de los devotos, pero en esta ocasión no fue como otros años.
Hacía dos años que sus fieles devotos aguardaban su arribo a la cabecera municipal, luego de que la pandemia obligó a suspender la tradicional procesión que reúne a miles de feligreses de la región y otros tantos migrantes.
Pero este año no fue el COVID lo que puso en riesgo la salida y entrada de la bendita imagen, los últimos sucesos violentos y la recomendación del INAH de cuidar a la imagen original marcaron el regreso del Señor de Araró a la Parroquia de San Pedro y San Pablo.
Para algunos no fue lo mismo, a otros no importó que la réplica sustituyera al original, la fe y la devoción es la misma.
El recorrido de la imagen Vicaria del Señor de Araró se hizo a pie, sin escalas, sin postas, aunque sí con arte, colores y el amor de un pueblo que pide y clama por la paz de Zinapécuaro.
En la cabecera municipal la imagen dio un breve recorrido por el primer cuadro del Centro, que lució pletórico y renovado. Sin lugar a dudas, el paso frente a Palacio Municipal fue muy emotivo y donde más pólvora se quemó durante el recorrido, por los fuegos artificiales.
El Señor de Araró permanecerá 50 días en Zinapécuaro, hasta el 26 de mayo, para después regresar al Santuario.