Una última visita a los Santuarios de la Mariposa Monarca y a esperar su regreso

Cada año, millones de mariposas monarca migran desde Canadá y Estados Unidos hasta los bosques de oyamel en Michoacán, para pasar el invierno y están por emprender el vuelo de regreso.

Este fenómeno natural es considerado uno de los más impresionantes del mundo y atrae a miles de visitantes a los santuarios de la mariposa monarca en la región oriente del estado.

Este fin de semana una riña entre comerciantes dejó un mal sabor de boca en un grupo de turistas que visitaron El Rosario, quienes además de sentirse acosados y presionados por los oferentes de comida, lamentaron que en algunas parte hubiera basura en medio de un espacio natural que debe ser mucho más cuidado.

Los santuarios, ubicados en los municipios de Angangueo, Ocampo y Zitácuaro, ofrecen un espectáculo único y emocionante. Las mariposas monarca cubren los árboles y el suelo, creando un manto de color naranja y negro que es simplemente impresionante.

En los próximo días los santuarios cerrarán sus puertas; las mariposas ya bajan a tomar agua y se disponen a iniciar el largo viaje de regreso a los bosques de Estados Unidos y Canadá.

La temporada de visita a los santuarios comienza en noviembre y se extiende hasta finales de marzo. Durante este tiempo, los visitantes pueden caminar por los bosques y observar a las mariposas en su hábitat natural.

La conservación de los santuarios y la protección de las mariposas monarca es un esfuerzo conjunto entre el gobierno, las comunidades locales y las organizaciones ambientales. Los visitantes pueden contribuir a la conservación comprando productos locales y apoyando a las comunidades que viven en la región.

Pero también vale decir que la conservación de este fenómeno natural corresponde a todos y hay que seguir las indicaciones de los comuneros, para proteger la biodiversidad y el patrimonio cultural de la región.