Tristeza, decepción e impotencia, perciben cientos de mexicanas y mexicanos ante la creciente ola de violencia que se vive en el país, la cual parece imparable, pero lo más lamentable es que ninguna institución creada para cuidar y preservar la paz y tranquilidad de la ciudadanía, ha sido eficiente y suficiente…
La llamada y recién creada Guardia Nacional, generó muchas expectativas…. Sin embargo, los números de víctimas y asesinatos se incrementan cada vez más… Ni EL Gobierno de Felipe Calderón, ni Enrique Peña Nieto, pudieron con este monstruo llamado violencia, mucho menos Andrés Manuel López Obrador ha podido siquiera reducir los índices delictivos, de asesinatos, secuestros y desapariciones sobre todo de niñas y jovencitas en el país…
La 4T, prometió mucho y ha hecho poco o casi nada…. Recordemos que sólo en una semana, fueron asesinados en un solo día 12 personas en Guanajuato de 67 que se registraron en el país….
En los últimos 35 días, “el 39% de los asesinatos se concentró en tres estados, que son Guanajuato, Chihuahua y Veracruz…
Ante la tangible evidencia, el presidente López Obrador, ha aceptado que el incremento de la violencia en el país en cifras se ha disparado… Destacando que sólo 6 estados del país, se han mantenido en bajos índices delictivos.
En los últimos 35 días, se registró el asesinato de 5 elementos federales de la Guardia Nacional, sufriendo además de humillaciones, retenciones y repliegues….Lamentable, sin duda, que las familias de estos seres humanos, pierdan hijos, esposos, padres, hermano… Abrazos y no balazos, sólo es una frase hueca y vacía, ante la falta de resultados….
¿Determinación de la Suprema Corte, asesta duro golpe a pensionados?
Muy lamentable que en el Gobierno de la 4ª. Transformación, la Suprema Corte de Justicia de la Nación, determinará que las pensiones del IMSS, se redujeran en un 40 por ciento, al pasar de 25 a 10 salarios mínimos.
Afectando con esta medida a trabajadores de la llamada generación de la transición, que son aquellos que iniciaron cotizando antes del 1° de julio de 1997, cuando se hicieron obligatorias las afores.
Es decir, alrededor de 20 millones de personas, conforman la llamada generación de la transición.
Este grupo tiene dos opciones: financiar su pensión con su afore u optar por una pensión otorgada por el estado, con la Ley de 1973.
Sin embargo, la SCJN determinó que en caso de optar por la pensión otorgada por el estado, está tendrá como tope, 10 salarios mínimos y no 25, que prevé la ley vigente.
Sin duda, pagar medicinas, alimentos y en algunos casos renta con una pensión menor a la que les corresponde, es a lo que se enfrentan aproximadamente 5 millones de jubilados del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE).
Este sector ha visto una pérdida de una quinta parte de su pensión después de que se modificó su cotización de salarios mínimos a Unidades de Medida de Actualización (UMA), lo que se traduce a una reducción de hasta 5 mil pesos en su percepción mensual.
Es por ello que la mayor exigencia de estos ex trabajadores, es que se calculen los pagos con base en los salarios mínimos y no en Unidades de Medida de Actualización.
“Desde 2008, los pensionados del ISSSTE, perciben como complemento a su pensión básica, las prestaciones mensuales denominadas bono de despensa de 100 pesos y uno de Previsión social múltiple de 120, sin embargo, ninguno de los dos conceptos se ha incrementado en los últimos 11 años a pesar de que se tiene derecho a que se les dé el aumento”.
De acuerdo al El Centro de Investigación Económica y Presupuestaria, existen tres características negativas del sistema de pensiones mexicano: en primer lugar, destacan que genera desigualdad, en segundo que es poco transparente y en último, que no es sostenible ya que los ingresos del país, no alcanzan para pagar las jubilaciones actuales.