Aunque por segundo año las fiestas patronales en honor al Señor de Araró fueron suspendidas por la pandemia, Zinapécuaro registra un alza importante de visitantes con motivo la Semana Mayor.
Las afectaciones por la cancelación de “la entrada del Señor de Araró” son incuantificables, pero si notables, sin embargo, la presencia de balistas y turistas amortiza la crisis económica que trajo consigo la pandemia del COVID-19.
La entrada de capital para los comerciantes disminuyó en más del 80%, a falta de esta celebración católica, sin embargo la asistencia de turistas a aumentado debido a las vacaciones de los días santos.
Los parques acuáticos han retomado vida, aunque mantienen los protocolos sanitarios.
Otro de los sectores que comienzan a recuperarse es el gastronómico, pues se ha incrementado también la venta de alimentos y de manera especial las tradicionales carnitas.
A pesar de la remodelación de la plaza municipal en la cabecera municipal y que debido a ello se reubicaron comercios ambulantes a los costados de la casa de la cultura, comerciantes como la Frutería “Charly” comentan que si se ha notado un incremento en las ventas en estas semanas vacacionales y que a pesar de la pandemia y cancelación a la festividad de la Entrada del Señor de Araró se ha podido mantener el comercio local.
La actual administración que encabeza Alejandro Correa ha remodelado diversos espacios públicos tanto en la cabecera municipal como en las comunidades para goce y disfrute de propios y extraños. Lugares históricos que te transportan en el tiempo y que debes conocer.