El Gobierno de Michoacán prepara el decreto para proteger 229 mil hectáreas de 133 áreas naturales en distintos polígonos de las cuencas en la entidad. Esto, en respuesta emergente para garantizar el abasto del agua y desalentar el cambio de uso de suelo.
En conferencia de prensa, el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla, destacó que esta estrategia es para conservar sitios que aún tienen hasta el 80 por ciento de conservación ambiental en buen estado, “y se va a dar seguimiento a todas, la Secretaría de Medio Ambiente está trabajando para hacer los estudios técnicos y las consultas necesarias con ejidos y comunidades para lograr esta conservación”, resaltó.
La meta es que, al 2024 se logre tener los decretos de todas estas reservas que estratégicamente están ubicadas en sitios vitales para el abasto de agua, tanto para el uso doméstico como para el agrícola e industrial.
De acuerdo con el titular de la Secretaría de Medio Ambiente (Secma), Alejandro Méndez López, las reservas incluyen zonas como la franja aguacatera, donde se contempla el mayor número de decretos y serían 80 en total en 10 municipios con una extensión conjunta de 106.7 mil hectáreas.
En el caso de la Cuenca del lago de Cuitzeo, donde es evidente la degradación a raíz del fenómeno del lago seco, se consideró una extensión de 31.5 mil hectáreas perteneciente a once municipios: Copándaro un mil 164 ha; Santa Ana Maya tres mil 247 ha; Huandacareo 8 mil 577; Chucándiro 10mil 021ha; Tarimbaro mil 990 ha; Álvaro Obregón mil 736ha; Charo 2 mil 708 ha; Indaparapeo 5mil 071 ha; Queréndaro 10 mil 611; Zinapécuaro 3mil 314 ha; y Cuitzeo con 2mil 014 hectáreas.
En la cuenca del Río Duero se contemplan 23 reservas que abarcarán 50 mil hectáreas; en la cuenca de Pátzcuaro 14 áreas naturales con una superficie de 33.3 hectáreas; en la región del Bajío 5.7 mil hectáreas del cerro Grande de La Piedad; y en la región Sierra-Costa, que priorizará espacios con conservación de fauna silvestre, se consideran 3 polígonos con una extensión de 1.3 mil hectáreas.