Apenas la semana pasada la Presidenta, Claudia Sheinbaum Pardo, arrancó en Michoacán el programa Fertilizantes para el Bienestar y ya hay publicaciones en redes sociales donde se ofertan los bultos de UREA y el DAP (fósforo-nitrógeno).
Y es que no todos los beneficiarios necesariamente trabajan su tierra, muchos la rentan o van a medias; el mediero se encarga de la explotación de la tierra, la cría de ganados u otras granjerías del campo. De ahí se explica que al recibir el fertilizante algunos buscan comercializarlo a pesar de que las reglas de operación lo prohíben.
“Desafortunadamente se les da el programa a personas que tienen su tierra, pero no la trabajan, no tienen producto y hacen negocio con el fertilizante”.
La visita de Sheinbaum a Michoacán generó una ola de posicionamientos políticos en apoyo a los programas para el campo, pero no necesariamente atinados o ciertos.
Y es que los fertilizantes gratuitos no son para todos, ni basta con ir al Ayuntamiento a solicitarlo, de entrada, deben pertenecer al padrón de Productores de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Producción para el Bienestar) y tener superficie de temporal.
Los productores con tierras de riego o con más de tres hectáreas no reciben fertilizante gratuito ni otro tipo de apoyo de la Federación, y son ellos los que producen a gran escala la mayor parte de los granos básicos del país, por ello, el reclamo de “más apoyo al campo” y el análisis que hace la Secretaría de Agricultura y que deberá incluir en el nuevo programa Cosechando Soberanía, mismo que será anunciado en marzo durante una asamblea con productores en Cuitzeo, de acuerdo con el compromiso establecido por la presidenta Sheinbaum.
Cabe recordar que la cantidad máxima de apoyo por hectárea, del programa Fertilizantes para el Bienestar, es de 300 kilogramos, mientras que la cantidad máxima de apoyo por productor o productora es de 600 kilogramos, para cultivos prioritarios como maíz y frijol.
Productores Unidos del Bajío y el Valle Morelia-Queréndaro reconocen y coinciden con la visión de lograr la soberanía alimentaria del país, pero advierte un enfoque equivocado con la forma en cómo se está distribuyendo el fertilizante.
Máxime si se considera que el Gobierno de México, a través de Petróleos Mexicanos (Pemex) aumentará la capacidad instalada en su filial Fertinal, ubicada en Lázaro Cárdenas, Michoacán, para producir más fertilizante.
