Las ventas de filete de pescado, rana y camarón en el tradicional puesto “La Rana Feliz” del mercado municipal de Queréndaro, se desplomaron hasta un 70 por ciento como consecuencia de las restricciones de movilidad que impusieron autoridades sanitarias y gubernamentales tras los brotes de Coronavirus.
Así lo manifestó Jorge Camacho Barrera, propietario del establecimiento comercial que actualmente expende solo producto para llevar.
Refirió que tras la primera ola de contagios por Covid-19, las ventas cayeron debido a que los ciudadanos optaron por no arriesgarse a contraer el virus; pero desde hace un mes que se cerró por completo el mercado y se prohibió el consumo en el lugar, las ventas cayeron drásticamente, lo que impacto la economía de las familias.
Camacho Barrera consideró que una buena parte de sus productos son consumidos por turistas. Al reducirse los flujos de paseantes, cayeron las ventas, no solo en este local, sino en otros establecimientos que expenden tortillas hechas a mano y carnitas.
En ese sentido, doña Rebeca Romero Ávila, quien por más de una década ha comercializado tortillas moradas en una de las esquinas del mercado municipal, dijo que sus ventas se redujeron 70 por ciento.
“No hay clientela”,dijo al tiempo que exhortó a los habitantes de Queréndaro y sus alrededores para que hagan barrio y consuman en la zona, a fin de que las familias que dependen de esta actividad puedan salir adelante.
Jorge Camacho coincidió con Rebeca Romero al señalar que el mercado “se ve triste y desolado; toda vez que la gente no puede comer en el lugar”.
Informaron que las escasas ventas les han permitido mantenerse a flote, por lo que demandaron de las autoridades acciones más contundentes para frenear la ola de contagios y volver a la normalidad.
Los entrevistados pidieron a quienes deseen acudir al mercado y realizar sus compras, para que lo hagan bajo las medidas de seguridad sanitaria, como mantener la sana distancia, usar gel antibacterial al manipular dinero y usar cubrebocas.
Explicaron que las autoridades estatales y municipales, asi como personal del Sector Salud constantemente realizan monitoreos respecto de la forma en que operan los locatarios, lo cual calificaron como positivo.
