Al rendir protesta al cargo de Presidente Municipal de Álvaro Obregón, Fernando Sánchez Juárez, llamó a los regidores que, desde hoy, conforman el Cabildo del H. Ayuntamiento 2021-2024 a trabajar “muy duro” y les quede la satisfacción de haber servido al pueblo.
Fue contundente al señalar que recibe un municipio destrozado económica y anímicamente, por lo que pidió guardar las banderas políticas y convocó al pueblo a ser partícipes de la evolución de la nueva administración.
Acompañado de su esposa, la señora Sandra María Lemus Vega, Fernando Sánchez ofreció un gobierno con responsabilidad y humildad, y pidió a quienes serán funcionarios municipales dar un trato digno y de respeto a los ciudadanos.
“No les voy a mentir, ni engañar, vamos habar la realidad. Y nos vamos a dirigir con honestidad en toda la administración… El pueblo nos ha dado la confianza y no tenemos que defraudarlos”.
Ofreció trabajar para todos, sin distinción, “se acabó eso de que a ti sí te apoyo porque me apoyaste en campaña y a los otros no. Eso quedará atrás. No se usarán los recursos públicos para cuestiones políticas”, asentó.
Como galeno anunció un plan de salud para hacer frente a la pandemia y evitar –dijo- que siga muriendo tanta gente.
Como una primera acción del nuevo gobierno municipal se suspendió el tiradero de basura en la comunidad de Trojes y al término del acto Solemne de Cabildo se procedió a la pega del Bando Solemne con motivo de las Fiestas Patrias.
Fernando Sánchez Juárez tomó protesta a los regidores Jesús Ávalos Paniagua, María Guadalupe García López, Adelaido Hernández Ramírez, María Sonia Pérez Arreola, Gerardo Hernández Graciano, Nancy Correa Ojeda y David Albor Fuerte, así como la síndica Alma Olivia Zárate Melchor.
En el patio de la Presidencia Municipal las nuevas autoridades fueron acompañados por la diputada electa, Luz María García, además del ex candidato Marcelo Yépez, y el representante del Diputado Federal Mauricio Prieto Gómez, el arquitecto Enrique Calvillo.
La presencia de sus padres conmovió hasta las lágrimas al doctor Fernando Juárez, quien al término del acto protocolario se fundió en un abrazo con ellos y su hermano Rubén, lo que motivó una ola de plausos por parte de los asistentes.