Poema Homenaje, en memoria del maestro “Lic. Guillermo Morales Ossorio”

Con   el   debido  respeto,   al   escribir   mi   mensaje,

En su memoria “Maestro”, quiero rendirle homenaje,

Con  profundo  sentimiento, le  llegará  yo  lo  sé,

Este sensible poema,  allá, hasta donde esté

.

En  la  Lima, Chinicuila, de este Michoacán hermoso,

Mil novecientos veintiuno, un seis de abril muy honroso,

Vio la luz de un nuevo día, como brillo de maizales,

Un ilustre michoacano, fue Don Guillermo Morales

.

Él inició sus estudios, por allá en Villa Victoria,

Cimiento en la formación, de una digna trayectoria,

Con apenas  doce  años,  morelia   lo   recibió,

Y en la David G. Berlanga, su primaria concluyó

.

Muy apegado a sus padres, pero de la escuela amante,

Luchó contra adversidades, en casa del estudiante,

Continuó con sus estudios, en su colegio adorado,

De San Nicolás de Hidalgo, donde fue muy destacado

.

Hombre de objetivos claros, y de aspecto muy formal,

Comulgó con la constante, superación personal,

Entró a la universidad, fue alumno muy dedicado,

Y  su  faro  luminoso, lo  convirtió  en  abogado

.

Así le llamaba él, a su linda michoacana,

Con acervo cultural, que del centro de ella emana,

Cuarenta y cinco fue el año, de su gran titulación,

reconocido su logro y honorífica mención

.

Consiguió con mucho esfuerzo, pero de forma paciente,

De  su  querido  colegio,  ser   elegido  regente,

Pronto después de su hazaña, y con el viento a favor,

Su entrañable facultad, le llevó a ser director

.

Distinguido nicolaita, siempre de corbata y traje,

Hombre virtuoso que tuvo, reconocido  linaje,

Al lado de un gran hombre, siempre hay una gran mujer,

Un   conocido   refrán,  dice   que   así   debe   ser

.

El  licenciado  Morales,  en  esa  etapa gloriosa,

Siempre recibió el apoyo, de su inseparable esposa,

Con Doña Elvira Ledesma,  su incansable compañera,

filántropo matrimonio, hecho muy a su manera

.

Ese apoyo que  ella  dio,  de  manera  tan  atenta,

Respaldó  la premiación, del  alcalde  en  el  ochenta,

Lograron con su entusiasmo, ayudar a mucha gente,

Del extranjero,  suroeste,  igual  de  tierra  caliente

.

Don Guillermo generoso, ha dejado gran escuela,

Reconocido por muchos, en México y Venezuela,

Puso en alto nuestro Estado, de manera magistral,

En congresos y jornadas, de Derecho Procesal

.

Entregado a la docencia, hombre culto y siempre atento,

De  probada  honestidad  y  distinguido  talento,

Gran jurista michoacano y con todos muy amable,

Procurando la justicia, el fue un gestor incanzable

.

Fue un excelso Diputado  y  me  imagino por eso,

El  consenso  lo  llevó,  a  presidir  el  Congreso,

También cuidó los destinos, del Supremo Tribunal,

“ Ius  Est  Ars  Boni  Aequi ”, su mensaje  principal

.

Me  duele  mucho  decirlo,  debo  hacerlo  con  ahínco,

Extrañamos al “maestro”, desde  el  año  ochenta  y  cinco,

Seguirás  en  la  memoria,  de  quienes  te  recordamos,

Y en calles, planteles y aulas, tu nombre en ellos grabamos

.

En  nuestra  historia  viviente, existirás  tú  lo sabes,

Con esa voz armoniosa y ese  trinar  de  tus  llaves,

Tus  hijos Rodolfo y Marco,  Gorky   y  el  buen  Esteban,

Al   cielo  con  devoción,   bellas   plegarias   elevan

.

Lupita,  Elvira  y   Natalia,  con Carmen  y  Maricela,

Le dan vida a la familia, de la mano de Gabriela,

Hoy nos gana la pasión, como  cuando  se  es  niño,

Rendir perenne homenaje,  al  “Maestro  con  cariño”

.

Sin dudarlo licenciado, su recuerdo sigue vivo,

En este humilde homenaje, con el cielo de testigo,

Me nació del corazón y me lo llevo conmigo,

Dedicarle mis palabras, al Padre, Maestro y Amigo